sábado, marzo 27, 2010

Nosotros los matamos, somos culpables




Dicen que el sonido es ensordecedor. Nada parecido al que Hollywood -y sus filmes de guerra- ha ensayado con nosotros y nuestros referentes de la realidad. Tras el disparo, la explosión. Luego, milésimas de segundo en agónica espera. ¿Será?, te preguntas. Pero ya sabes la respuesta, “el cuerno de chivo” retumbó.


A la primera detonación le sigue otra; luego diez, veinte, hasta que pierdes la cuenta, y todas ellas se convierten en una eufonía mortal. Pero no es todo, un nuevo estallido destaca, agudizas tus sentidos para identificar el objeto del cual proviene. “Son granadas Alex, no mames, métete a tu cuarto porque puede haber balas perdidas”, escuchas.


Su moderna arquitectura, ardid de desarrollo, ha forjado una línea imaginaria, cuyo hermetismo fue roto luego de la muerte de Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, estudiantes de posgrado del Tec de Monterrey, en enfrentamiento entre un grupo de sicarios y elementos del Ejército mexicano, la madrugada del 19 de marzo.


En el cruce de la avenida Eugenio Garza Sada y Luis Elizondo, desde las 12:50 del día antes mencionado, dominó el caos y la incertidumbre. Varios grupos de hombres, dentro de camionetas, dispararon frente a las instalaciones del ITESM.


Dentro del campus, estudiantes del Tec se replegaron hacia la biblioteca escolar –que funcionaba las 24 horas-. Y ahí estuvieron hasta las 6 de la mañana de ese mismo día.



Redes, #BalaceraTec


El hashtag #balaceraTec, la madrugada del pasado viernes, se convirtió en el número uno en Twitter hacia las 3 de la madrugada, según un reporte de @twirus_es –un contador de trends topics en la red de microbloggin-.


Jóvenes dentro de las instalaciones del campus twitteaban lo que veían o escuchaban. “Se siguen escuchando detonaciones en GARZASADA en #monterrey ahora hacia el SUR: Más allá de Blvd Acapulco”, escribió @jfaragon. Y la sobreinformación tradújose en confusión.


@Mau_SantosG, por ejemplo, narró los hechos desde el inicio de la balacera. Sin embargo, sus tweets desaparecieron. “Si, escribí prácticamente al momento, pero los borré”, y agregó “fue difícil saber qué hacer cuando lo que puse salió en prensa”.


Usuarios de la red instaron a la calma, a la verificación de información y a la espera de una versión oficial. Sobre todo cuando, a las dos de la madrugada, se reportó que dos estudiantes murieron rafagueados. Información que fue desmentida por el gobierno estatal, que afirmó la muerte de dos sicarios, no estudiantes. Datos de los que la realidad forzó a desmentir: “sí eran estudiantes".


Durante el vertiginoso flujo de información, muchos esperaron; otros más, sin restricción, retuiteaban todos los datos publicados. El Norte y Reforma fueron los primeros medios que publicaron la nota de la balacera en sus portales web.



La comunidad: “Todos somos el Tec”


No sólo comparten instalaciones, sino una visión en común, la de su alma mater. Todos reconocen su identidad, son estudiantes del Tec. La desgracia fue compartida, y la solidaridad se hizo más que evidente. Conciencia de grupo, pues.


“Es raro como cosas así fuertes como #balaceraTec te hacen sentir parte de una comunidad o, más bien, volver a sentirte parte de”, afirmó Juan Antonio Zertuche, quien hace casi dos años se graduó del ITESM, Campus Monterrey.


El impacto, no obstante, de este hecho en Monterrey repercutió sin duda en otros campus. En el de la Ciudad de México, por ejemplo. Alejandro Mora –estudiante de Ingeniería en Tecnologías Computacionales- afirmó sentirse “indignado, molesto y muy triste…porque lamentablemente en esta ocasión se vio afectada la comunidad del ITESM”.


Sin embargo, fueron pocos los estudiantes que se enteraron de la balacera del 19 de marzo. Fue hasta el lunes y martes, 22 y 23 respectivamente, que se enteraron de los hechos. De inmediato, la mayoría de estudiantes respondieron a la convocatorio de vestir de luto en memoria de sus compañeros fallecidos en Monterrey.


Así, fue hasta la noche del 22 de marzo que el director del ITESM Campus Ciudad de México, Arturo Molina, emitió una invitación para que el miércoles 23 se guardara un minuto de silencio por la muerte de Jorge Mercado y Javier Arredondo.



Queremos un cambio


De ExpresaTec a ExpresaTodos. ¿Quién no querría recibir respuesta a múltiples preguntas? ¿Quién no querría reconocer culpables, o bien, expiar sus culpas o penas en otros?


En una invitación hecha por el Doctor Rafael Range, director de ITESM Campus Monterrey, se instó a los estudiantes a reunir sus propuestas “de cambio” para presentarlas al presidente Felipe Calderón.


En una conferencia que se transmitió el 25 de marzo en todos los campus del ITES, el rector afirmó que no es suficiente con quejarse, sino ir más allá, es decir, presentar vías de solución.


Y ante la queja generalizada, queda el examen de conciencia. El miedo, que parecer predominar, no es la justa respuesta. La acción debe imponerse, dicen algunos.

Sin embargo, hasta ahora no hay culpables, ni los habrá. Tal vez somos todos, que desde pequeños actos favorecemos la desigualdad y corrupción. Aún así, nosotros no los matamos.



1 comentario:

  1. Me gusta la idea de incluir lo que pasa en Twitter. No sé sí se puedan poner links, para que así se nos sea más accesible el acceso de tus fuentes (los twitteros o el hashtag).

    P. D.- Se repite el video.

    Saludos ¡!

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