martes, abril 27, 2010

#AventónCiudadano; propuestas civiles al Senado


Luego de una odisea de cinco días de recorridos a lo largo de la República Mexicana, con ayuda de 'aventones', representantes de la Asamblea Nacional Ciudadana - también twitteros- entregaron el documento que exige la inclusión de las propuestas ciudadanas en la Reforma Política.


Más allá de la protesta, llega la propuesta. Esto quedó demostrado con la presentación, ante el Senado, de la copia del documento conformado por la Asamblea Nacional Ciudadana que detalla la exigencia de colocar “en el centro de la representación política a la ciudadanía, sus aspiraciones y sus necesidades”.


Daniel Gershenson, en entrevista para Milenio.com, informó que en el Senado los representantes de ANCA fueron recibidos por los senadores Pablo Gómez Álvarez, Javier Castellón y Graco Ramírez Abreu; el último, presidente de la Comisión de Reforma del Estado.


En un “intercambio de ideas bastante interesante”, detalló, los legisladores mostraron su disposición para “asumir la responsabilidad de incluir a la sociedad civil en la toma de decisiones.”


#Aventónciudadano; la aventura altruista





Luego del éxito de ¡Ya bájenle! acompañado de la protesta simbólica de #focociudadano, la Asamblea Nacional Ciudadana convocó para participar en la actividad de #aventónciudadano.


A través de éste se recorrieron, del 19 al 23 de abril, los estados de Baja California, Sonora, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Querétaro, Guanajuato, Michoacán, San Luis Potosí, Coahuila, Durango, Zacatecas, Yucatán, Quintana Roo, Campeche, Tabasco, Veracruz, Puebla, Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Morelos.


La dinámica consistió en que cuatro grupos participantes fueron trasladados por voluntarios que “en coche, trailer, bici, burro, caballo, triciclo, de caballito, o cargados de costal”, los transportaron por los estados antes mencionados.


La razón: presionar a las cúpulas del poder para que “¡abran el sistema!” y tomen en cuentas las acciones y participaciones de la ciudadanía en la toma de decisiones necesarias para transformar el país.


Daniel Gershenson, quien cubrió la ruta Mexicali, Tijuana, SLRC, los Mochis, Culiacán, Mazatlán, Guadalajara, Morelia, Lerma y DF, comentó que la participación de la ciudadanía en el #aventónciudadano fue totalmente altruista porque ninguno pidió gratificación y, en la mayoría de los casos, les pagaron comida y casetas de peaje.


Así, dijo el cofundador de ALCONSUMIDOR AC, “la consolidación del fenómeno de las redes sociales en México robustece la cultura profunda de la formación de asociaciones civiles y de una ciudadanía más participativa.”


Twitter y organización social, ¿hacia dónde?


Pensar en la realización efectiva de proyectos como #focociudadano o #aventónciudadano resulta imposible sin Twitter, afirmó Gershenson.


Opinó que las redes sociales crecen exponencialmente y son fuente de vinculación ciudadana.


“Es absolutamente inconcebible pensar en los proyectos que hemos emprendido, desde la sociedad civil organizada o desorganizada, sin Twitter y la ayuda los twitteros”.


Recorrer más de 6 mil kilómetros, en 45 ciudades de la República Mexicana, hubiera sido un “sueño guajiro” sin dicha red social. A través de ésta, es posible que la sociedad se articule en proyectos altruistas que, sin las redes sociales, serían “quijotescos”, dijo Gershenson.


“Twitter une a desconocidos que quieren compartir el deseo y acción de cambiar este país. Es una vinculación gratuita y sin condiciones en la que incluso participan mexicanos o personas de otros países que no radican en México”.


Ver nota completa en Milenio.com

Yo evité que lo destruyeran, ¿y tú?


Despiertas con un reclamo que poco a poco se ha hecho cotidiano. Has sacado fotocopias desde el inicio de la carrera. Hoy, como ayer, deseas tener un billete adicional en la bolsa del pantalón para comprar – si quiera- el libro de la semana.


Que todo gire, siempre

La canción de ayer....



Volteretas de la vida, ésta es la de hoy...

sábado, abril 24, 2010

Nada mejor.

Reuters.


Ya vienes.

Y estoy. Inmóvil. Y Tecleo. Y miro el monitor. Y no tiemblo. Y te espero. Y las noticias no ayudan. Y la esperanza se extingue. Tú entiendes.

jueves, abril 22, 2010

Más allá del disfraz, hizo de su vida un verbo: Günter Wallraff


¿Y tú, qué harías por saber aquello que durante mucho tiempo ha estado oculto. Por descubrir eso que -parcialmente evidente- nadie ha decidido mostrar, a pesar de estar ‘ahí’? Günter Wallraff respondió: “enmascararse para desenmascarar a la sociedad, hay que engañar y fingir para averiguar la verdad”.


Durante más de 25 años de realizar investigación periodística, Wallraff no sólo modificó su rostro, cabello, modo de vestir o hablar, sino vivió años de una transformación interna y externa. No sólo de él hacia el mundo, sino al revés. Cada experiencia lo transformó. Su empatía lo camuflajeó, y sufrió uno a uno los pesares de su “objeto” de investigación.


Este periodista indeseable, como él mismo se nombra, hizo de su vida un verbo que el gremio periodístico adoptó con audacia e insensatez: Wallrafear. Con insensatez porque no es sólo el disfraz por sí mismo, sino la representación de la relación vital entre el periodista y el mundo que le rodea.


Los libros de Wallraff nos obligan a repensar el ‘oficio’ periodístico como un estilo y convicción de vida. No sólo palabras. 24/7 dicen algunos. Él, cuyo único temor –dice- es “ser descubierto”, nos urge a escapar del vicio de la “declaracioncitis”, al apostar por la investigación real.


El libro en cuestión: Cabeza de turco. El reportaje plantea la historia de Günter al hacerse pasar por un turco en la década de los 80. El libro, entonces, refleja la persecución que sufren estos últimos en Alemania.


Wallraf evidencia que cuando un inmigrante va a buscar trabajo, es explotado: no cobran sueldos a pesar de ser obligados a trabajar demasiadas horas seguidas. Además, no tienen cobertura sanitaria, ni gozan de días de descanso.


Alí, como se autonombra Wallraff, evidencia también algunas empresas como Thyssen o McDonalds. No sólo por las condiciones de trato a los inmigrantes, sino su obscura dinámica de trabajo, entra la ilegalidad y el cinismo.


El libro se rige por una hábil narración, predominan las descripciones y la inserción de diálogos que sustentan la historia. Wallraff no necesita abusar de calificativos, las descripciones mismas denuncian. Indignan.


Son 29 apartados en los que el periodista desarrolla su investigación, su vida. La de “los otros”. Se reconoce, a través de sus letras, las paradojas que encierra el capitalismo, encaminado sólo a la acumulación de capital, no al bienestar del ser humano. Éste parece ser sólo un medio. Esclavo.



miércoles, abril 21, 2010

Y tú, ¿qué sigues?



Fotos: Paola Alín Martínez M.

Visto de colores, y te quiero

Foto: AP

Qué locura. Ni esta luz precaria que lastima mi vista frente al monitor me impide escribir[te]. El asiento, confieso, es incomodísimo. Ganas de levantarme y dejar inconcluso este texto no me faltan.


Continúo, nomás para romper con la costumbre de huir con el viento en contra. Y no sólo con el texto, contigo también. Con la quimérica promesa de compañía, besos, abrazos, y mucho más. Debates y debrayes nocturnos, quizá. Cuando comienzo a desvariar, tú sabes. Y reímos.


Ya dijiste lo que esperas de mí. Y si cuenta, aquí –allí y allá- estoy. Contigo. No soy la de ayer, ni la de mañana, así que aún hay esperanza. ¿Qué me quieres? Yo también, y ya.


Soy transparente, suena la canción de fondo. Y mi texto cortado comienza a agobiarme. Ya me acostumbré a 140 caracteres, seguramente. Mejor paro con la promesa de abrazarte cuando menos lo esperes. Y te quiero.


martes, abril 13, 2010

El paredón: Paulette, Scherer y Zambada


Sujeto la piedra, pero no la lanzo. La observo, miro sus formas y pienso en el daño que causaría al caer en una cabeza ajena, en la sien quizá, en la mía. Todos, piedra en mano. Al frente, quien se atrevió a publicar la foto de Paulette - leí por ahí, lívida, fría, muerta-.


La foto de Paulette fue publicada por Milenio el 6 de abril, en el portal web del diario>. En seguida, una ola de comentarios acusaron al medio de “sensacionalista” y carente de “ética periodística”. El eco retumbó, más en las redes sociales. En Twitter nadie calló al respecto.


Lo admito. No me gustaría ver publicada la foto de un familiar o ser querido muerto. Sin embargo, el debate que surgió en torno a la imagen de Paulette Gebara Farah me parece erróneo y, en la mayoría de los casos, hipócrita y romántico; sobre todo el que se originó desde el gremio periodístico.


Erróneo, porque la foto misma es un material periodístico que no puede ser omitido ni escondido. Ocultar información puede no distar de mentir.


Un debate que se perfile para un cambio pragmático y eficaz debe pensarse e iniciarse con sinceridad. Un medio de comunicación es una empresa de información. Responde a intereses que ahora, más allá de los ideológicos, son los del capital. Sin embargo, lo anterior debe lograr un equilibrio con la urgencia por la elaboración de contenidos periodísticos de calidad. Con valor informativo y humano, éstos no pueden ser por más tiempo ausentes.


¿Cómo logramos esa mediación? Es la pregunta.


El reclamo por la foto de Paulette se quedó estancado en el romántico dilema moral, sin ofrecer la oportunidad de replantear los paradigmas que rigen el periodismo mexicano. Medios y lectores no ahondaron en la exigencia de un debate puntual y eficiente que, en efecto, replanteara la labor de los medios en México.


Decir que urge un cambio en el Periodismo mexicano es igual a nada, sino se establecen los puntos que lectores y medios han de modificar. Las prácticas que hay que evitar y las que es preferible y conveniente fomentar.


La ‘narcoentrevista’, dicen


Redes sociales, protagonismo. EL 3 de abril un nuevo debate surgió en Facebook y Twitter. #Scherer-Zambada se colocó entre los tópicos más socorridos, cuando la Revista Proceso publicó el relato de un encuentro entre el periodista y el capo.


Ante la sorpresa de muchos, el disgusto de otros y la envidia de otros más, Julio Scherer e Ismael “el Mayo” Zambada sostuvieron un encuentro en un lugar desconocido. El ‘narco’ lo pidió.


El primer disgusto sobre el producto periodístico de dicho encuentro tuvo su origen en el dilema de cualquier estudiante de Géneros Periodísticos.. ¿Entrevista, crónica…cuento quizá?

jueves, abril 01, 2010

Perdí el estilo, de alcurnia no soy


Para muchos, un misógino. Otras más, opinaban que era divertido, espontáneo y un excelente periodista: hecho de la experiencia. El punto es este: admitió que la Universidad nos roba el estilo, ése que es lo único que realmente tenemos.


El estilo al escribir, pues. Al contrario, admitió el profesor, los profesores deberíamos identificar los estilos personales de redactar y pulirlos, sin someterlos a un esquema.


“Escribes encojonadamente bien” me dijo alguna vez un profesor. Qué hice mal, entonces, para percibir que hoy lo que me falta es estilo. Gracias.


Una cosa siempre lleva a otra. Ahora mismo recuerdo a mi actual profesora de Periodismo Especializado. Ella, al contrario de la mayoría, invita a experimentar con la forma de contar historias. La nota, dice, siempre es la misma. El reto es dotarla de un plus: nuestro estilo, supongo.


Estilo, te recuperaré, porque pasión aún hay.